Mucha gente alquila su piso vacío a través de una inmobiliaria en Bilbao para obtener un ingreso extra, pero llega un punto en que decidimos vender la vivienda. Si está vacía no pasa nada, pero el problema lo podemos tener al vender nuestro piso si tenemos un inquilino viviendo en él. Contar con la ayuda de tu inmobiliaria en Bizkaia de confianza te permitirá a resolver las posibles dudas que puedas tener.
Informar al inquilino de la operación inmobiliaria
Tendrás que informar al inquilino de la operación un mes antes de que se cierre la compraventa. Y no solo eso, el inquilino tendrá preferencia en la compra a no ser que esta posibilidad haya sido explícitamente descartada en el contrato de alquiler.
Si no es así, el inquilino actual puede igualar la oferta que tenemos y en ese caso se quedaría con el piso. Si la oferta es inferior, no estamos obligados a vendérselo y se lo puede quedar el otro ofertante.
En estos 30 días naturales previos a la fecha de la compraventa, además de comunicarle al inquilino la decisión de vender el inmueble, debes informarle sobre el precio de la operación inmobiliaria y la fecha prevista para la misma, además de las condiciones de transmisión del inmueble. Una cuestión diferente es cuándo debe abandonar el piso el inquilino, pues depende de varios aspectos.
Cuando piso y contrato están inscritos en el Registro Público de la Propiedad, el contrato de alquiler debe cumplirse; pero si el contrato no lo está, el comprador queda subrogado los primeros cinco años del contrato. Si ni piso ni contrato están inscritos, el nuevo propietario puede dar por acabado el contrato, dándole al inquilino tres meses para dejar la vivienda. Contar con la ayuda de tu inmobiliaria en Bilbao te ayudará a evitar problemas en este sentido.